lunes, 29 de noviembre de 2010

Reflexiones en torno al Cursus Honorum.Que Dios guíe, ilumine y proteja al senador Manlio Fabio Beltrones Rivera. En su designio presidencial.

In memoriam de Luis Donaldo Colosio Murrieta. Que duerme el Sueño Eterno de Escipión el africano.

Don Quijote cabalga de nuevo.

Del prototipo del político(a) y el o la estadista.

Golsa y parafrasis del dialogo La República de Marco Tulio Cicerón ( 106-43 a.C.) ; o interpretaciones libres del Sueño de Escipión, Capitulo VI de la Republica.-

El ilustre romano Marco Tulio Cicerón , al escribir sobre el tema de la Republica lo hizo a imitación del filosofo griego Platón ( 427-347, a. C.) , para ello se basó e el pasaje del Capitulo X de su Republica o de lo Justo , el cual esta referido al regreso a la vida de Panfilio Er, el Armenio ; según la crónica , este fue un soldado quien ya colocado sobre la pira funeraria habría vuelto a la vida y narrado muchas cosas extrañas que presenció en el Hades; como es el juicio final , los castigos a los perversos , las recompensas a los justos , la selección y trasmigración de las almas .

El protagonista del sueño es Publio Cornelio Escipión Emiliano, quien fuera un político y militar romano que nació en 185 a. C. y murió en 129 a. C. , fue nieto de Escipión el Africano Maior, que nació en Roma, el 20 de junio de 236 a. C. y muere en la Villa de Liternum, Campania, el 3 de diciembre de 183 a. C. este fue también un prominente político de la República Romana que sirvió como general durante la Segunda Guerra Vs. los cartagineses o Púnica .

Su gran fama se debe al hecho de ser el único general romano capaz de derrotar a Aníbal Barca, gesta que le valió la adhesión a su nombre del ''agnomen'' de ''Africano''.

Es descrito por las fuentes antiguas como un hombre de carácter benévolo, de ideología liberal, afable y magnánima. Su genio militar se debió a la perspicacia y al ingenio, haciendo saber a sus legiones romanas en varias ocasiones que actuaba bajo la protección divina de los dioses Manes del Panteón romano.

Ambos personajes son modelo del Estadista para el Jurista, Político y Filosofo romano, Marco Tulio Cicerón.

En el mismo sueño aparecen los antepasados de Publio Cornelio Escipión Emiliano : Escipión el Africano Maior , abuelo de adopción, y Emilio Pablo, su padre natural. A Publio Cornelio Escipión Emiliano ambos le aseguran que la luz de la inmortalidad resucita el cuerpo.

El que ha pasado y dedicado su vida a los otros, como es el servicio público, vivirá para siempre; el que vive sólo para sí mismo no merece la inmortalidad.

Es el caso que Marco Tulio Cicerón en su republica no se valió de elementos fabulosos en su ficción , como aquel autor ( Platón) en su obra -anterior- sobre la Republica , sino mediante un ingenioso pero racional sueño , nos quiso dar a entender que las cosas que se decían sobre la inmortalidad de las almas y sobre el cielo y el infierno no eran ficciones salidas de las mentes de los filósofos ni mitos inverosímiles ,de esos de los que hacen burla los epicúreos como –el que realizó el sectario Colotes-, sino hipótesis de hombres dignos y sabios.

El sueño de Escipión, para todos los comentaristas posteriores al renacimiento sobre todo los humanistas, es toda una alegoría sobre la justicia y el ejercicio del poder político, o Cursus Honorum, para estos eruditos a Publio Cornelio Escipión Emiliano en el sueño se le aparecen dos diosas: la Fortuna y la Constancia, para que elija a una de ellas como guía de su actos y protectora de su riesgosa y polémica vida política.

La Republica y las leyes , son las obras cumbre del jurista, político y filosofo romano Marco Tulio Cicerón, quien nació en Arpino , región del Lacio, al este de Roma la eterna , 106 a. C. , y muere asesinado el 43 a. C. ; en los capítulos o libros del primero al sexto reflexiona el autor sobre el amor a la patria y la necesidad de la justicia conmutativa y distributiva ; acto seguido analiza detalladamente el origen y formación de la republica romana, mismo que lo atribuye al tiempo, las generaciones y los hombres .

Luego precisa que no es la naturaleza ni la voluntad , sino la debilidad humana , la fuente de la justicia, de ahí la necesidad de la educación y la cultura que nos sirven para dominar las pasiones y los vicios, pero deben censurarse los excesos de la música y los poetas , refiere que la filosofía nos ayudará a hacer voluntariamente lo que tendríamos que hacer por la fuerza.

Publio Cornelio Escipión Emiliano, durante el sueño busca en el cielo a su padre, Emilio Pablo y al encontrarlo se deleita por verlo. Emilio Pablo le dice que la alegría en el cielo es completa, al no estar acompañada de sufrimiento.

La Tierra, pequeña, miserable, cubierta de nubes, está llena de gente indiferente al dolor ajeno. Horrorizado, pide a su padre que le deje quedarse en esa tierra eterna. Sin embargo, Emilio Pablo le predice que él tiene que llevar a cabo una gran misión en la Tierra: destruir al enemigo, después de que elija entre la Fortuna o la Constancia.

Ahora bien y con relación a las elites gobernantes, su padre Pablo Emilio en el sueño le manifiesta que se requiere un Rector de la republica y debe ser este un hombre de grandes cualidades y muy instruido, esto es, que sea inteligente, justo, tolerante y retorico con el fin de poder expresar con toda la facilidad con su elocuencia los pensamientos más recónditos encaminados a dirigir al pueblo.

También, debe saber derecho, conocer la lengua y cultura griegas, hecho que se confirma con el caso de Catón el viejo o el Censor, quien ya en su extrema vejez mostró cuánta era su utilidad. El regidor o protector de la patria, debe mirar más por el interés del pueblo que por los deseos de ese mismo pueblo.

Publio Cornelio Escipión Emiliano le pregunta a la diosa Fortuna qué ayuda le ofrece para llevar a cabo su tarea. Ella le dice que su poder de destruir y crear, corromper la inocencia y entronizar el mal.

La diosa Constancia, en cambio, le dice que sólo ella puede conceder el poder de la lealtad. La virtud sólo algunas veces es derrotada por la violencia, mientras que los malos actos son transitorios, a diferencia de los buenos. La Fortuna no puede privar a los héroes de la esperanza en una vida mejor y la fe en la palabra empeñada.

Publio Cornelio Escipión Emiliano les pide tiempo a las diosas Constancia y Fortuna , pues no tiene el corazón ni la mente en disposición de elegir. Ambas diosas contestaran a sus preguntas.

Quiere saber él dónde está, y le indican que en el Templo del Cielo, y que las magníficas luces que ve son las estrellas, y que la música que oye es la armonía de las esferas. Les pregunta quién crea esta armonía. La Constancia le responde que hay un poder detrás de ellas, que mueve las esferas como las cuerdas de una cítara, y es Dios.

Se cita textualmente el capitulo IV de la Republica de Marco Tulio Cicerón, pagina 175, y siguientes Akal/Clásica, edición de 1989, en lo atinente al sueño :

“Publio Emilio Escipión Emiliano el Joven descansaba en el palacio del rey Masinisa de Numidia país ubicado al norte del África (quien contaba con 90 años y había sido sostenido en el trono por su abuelo Escipión el Africano o el Maior ) y después de haber sido dispensado con una esplendida cena , la cual fue seguida de una larga conversación , en la cual el rey Masinisa , no hablaba más que de su amigo Escipión El Africano Maior , recordando de este no solo sus hazañas políticas y glorias militares , sino incluso sus palabras.

Después nos retiramos a descansar y a mi me abrazó el sueño de manera más fuerte de la acostumbrada.

Y he aquí lo que me sucedió, yo creo , al menos que fue consecuencia de lo que habíamos estado hablando durante la vigilia … como ocurre , a veces , que nuestro pensamientos y conversaciones provocan en el sueño , evocar nítidamente lo soñado y así poder hablar después de ello estando despierto , así que Escipión el Africano Maior se me apreció bajo el aspecto que a mi me resultaba más conocido , esto es según su más vivo retrato más que como era el en realidad.

Tan pronto como lo reconocí, sentí un fuerte estremecimiento; pero él me calmó con estas palabras. Tranquilízate, Publio Cornelio Escipión Emiliano, no temas y disponte a gravar en tu memoria lo que te voy a decir…

Pero para que te sientas con más estímulos en tu función de protector de la republica , ten en cuenta los siguiente : todos los que hayan contribuido a garantizar la seguridad de la republica , todos los que la hayan ayudado , todos los que la hayan engrandecido tienen un lugar destinado y reservado en el cielo, donde, felices, disfrutan de una vida eterna, ; pues, a aquel dios supremo que rige todo el universo , nada le resulta más agradable , al menos de cuanto sucede en la tierra , que las asociaciones y reuniones de hombres en virtud del vinculo del derecho , que reciben en nombre de ciudades. Sus dirigentes y protectores regresan a este alto lugar de donde partieron.

Luego le dice Pablo Emilio , tu, Escipión Emiliano , lo mismo que tu abuelo , aquí presente , lo mismo que yo, que te engendré , cultiva la justicia y los deberes de la piedad, que, si son grandes cuando se trata de los padres y allegados , lo son muchísimo más todavía cuando se trata de la patria; esa vida constituye el camino hacia el cielo y a esa reunión de quienes ya vivieron y, libres del cuerpo , habitan aquel lugar que ves allí ( se trata de una espacio circular , que brillaba en medio de las llamas , blanco y resplandeciente) ; lo que vosotros llamáis Vía Láctea , tal como lo aprendiste de los griegos , desde ese lugar se me mostraba con una luminosidad asombrosa .

Había estrellas que nunca habíamos visto desde aquí, desde la Tierra, y de unas dimensiones como nunca habíamos sospechado que fueran; la más pequeña de estas, que era la que estaba más alejada del cielo y más próxima a la Tierra , brillaba con luz ajena .

El volumen de las estrellas superaba con facilidad la magnitud de la tierra .Tan pequeña me pareció la Tierra que sentí una gran desilusión cuando vi que nuestro imperio, no representaba más un punto de la misma, por decirlo de alguna manera.

Los hombres cultos, al imitar todo esto con sus instrumentos de cuerdas y con sus cantos, consiguen abrirse la puerta de retorno a este celeste lugar, lo mismo que aquellos otros que con sus portentosas inteligencias cultivaron durante su vida humana los estudios divinos.

Sábete , por tanto , que tu eres un dios, si es cierto que es un dios quien tiene fuerzas , quien es capaz de sentir , quien tiene la facultad de recordar , el que puede preveer, el que dirige, modera, y pone en movimiento tanto este cuerpo a cuyo mando ha sido destinado como este mundo del que él es el principal dios. Y lo mismo que el mundo que es en parte mortal lo pone en movimiento ese dios , que es eterno , así al cuerpo que es frágil lo mueve un alma eterna.

Al final del sueño Escipión Emiliano muestra su sabiduría y prudencia escogiendo la Constancia, desafiando sin temor a la Fortuna, porque es el reino eterno lo que prefiere su corazón.

La diosa Fortuna se enfurece y desencadena su ira en forma de tormenta. Publio Cornelio Escipión Emiliano mantiene su coraje y se despierta, de nuevo en el reino de Masinisa, en Numidia sintiendo que a su lado está la Constancia, la paciencia, la esperanza y la firme voluntad de cumplir con el deber para con su patria.