miércoles, 13 de octubre de 2021

Los Oficios, Marco Tulio Cicerón. La Ciudad de Dios, San Agustín. El Manual de Carreño.

Lic. Francisco Javier Aragón Salcido.

De aquel Huatabampo, Sonora, México donde nací en 1951,  hace ya siete décadas, y en el cual viví hasta los 14 años,  1965, no quedan ni sus luces. Éramos un pueblo de 10 mil habitantes, amable, alegre, pacífico y trabajador, rico de espíritu, sin exagerar, sentía que vivía en la CIUDAD de DIOS, soñaba con ser sacerdote, o quizás hasta llegar a ser todo un señor obispo, de perdida me imaginaba llegar a ser  como el evangelista  San Lucas ,  un médico de cuerpos y almas, este mismo PUEBLO ,  cuenta ahora con más de 80 mil habitantes , por lo que hoy en día tiene distintas  metas ,  valores, costumbres  .

Antaño se adoraba   a la Virgen de Guadalupe, se respetaba a la Iglesia , empero, en la actualidad está sumamente desprestigiada ,  y , ello debido a la pederastia de algunos  párrocos  , sí, mi  IGLESIA,  la  CATOLICA , APOSTOLICA y  ROMANA  , ya no es más la  CIUDAD de DIOS o bien , el  PARAISO TERRENAL que imaginábamos de niños -hoy en día enfrenta la  competencia de los  CRISTIANOS y sus diligentes pastores que han surgido como hongos tras las lluvias de verano; es que en todos los  barrios, pueblos y colonias  - ;  me acuerdo  que se respetaba al  Ejército, se cantaba el himno nacional completito, y con emoción, al   Policía de la esquina se le quería, a las Mamas y Abuelas también  , al papá se le temía,  se adoraba la Suave Patria, y que decir de la bandera,  éramos fieles a los pactos,  y,  a la palabra empeñada, nuestras metas eran estudiar, jugar, trabajar,  fundar una familia, prosperar , envejecer y morir rodeados de nietos en santa paz. Pero todo eso con el pasar de los años, cambio.

¿Existe una Crisis de Principios y Decadencia de Valores en Sonora y México? . Las citas han sido tomadas de Wikipedia la Enciclopedia Abierta, Colectiva y Libre de Internet. Mismas que gloso y parafraseo.

Según Marco Tulio Cicerón ,  venimos a este mundo con ciertos deberes , oficios , principios , valores éticos y,  obligaciones, innatas, morales ,  ya que el hombre es bueno por naturaleza , puesto que   su alma es de origen divino, inmortal ; en cambio el mal , es algo  aprendido  ; por lo tanto el primer gran  deber  es para con el  Demiurgo , Arquitecto o Dios supremo y Creador  del Universo ; el segundo deber es con el suelo que nos vio nacer o sea,  la patria grande generosa ; el tercero es  con nuestra familia pues nos dio la vida y el sustento en nuestra infancia y juventud  ; un cuarto oficio es con el prójimo, los amigos,    creando la sociedad civil a través del vínculo contractual , mismo que da vida a la reciprocidad ; y luego viene un quinto deber que atañe a la prohibición de no dañar al otro .

Actualmente vivimos una especie de renacimiento espiritual, pero no todos lo entienden, aceptan, practican, mismo que está emparentado con el escepticismo, hay por lo tanto una especie ateísmo neo humanista, es una reelaboración del siglo de las luces, a la que denominan los intelectuales inorgánicos, como post modernidad.  No obstante entre más se expande o dilata e universo,   y aumentamos nuestra frontera del conocimiento, más nos percatamos de que no tubo principio ni fin, Big Bang , simplemente el universo, Es . Por ello dijo el Eclesiastés;  No hay nada Nuevo Bajo el Sol.

El amor a la patria se ha visto diluido por la globalización económica y,  de la información, hoy en día habitamos la NUBE, se dice que está en ISLANDIA ;  la familia nuclear tradicional, está siendo sustituida por la homoparental, hay una gran presencia de los platónicos seres Andróginos   ;la justicia distributiva está siendo relegada por las economías de escala, y , el no alterum laedere, se ve afectado por los poderes facticos, que no delimitan sus ámbitos de actuación , sea ya  legal o en su caso,  ilegal, pensemos en los PANDORA SHORES PAPERS.

Por lo tanto, si no están en armonía estos deberes, principios MORALES , oficios, valores ETICOS , surge el inefable conflicto.  

Tiempo atrás el griego Hesíodo dijo en Los Trabajos y los Días, que hay dos luchas, una buena que es la emulación, que lleva al progreso, y una mala que es la envidia y nos lleva a la guerra.

El libro de Marco Tulio Cicerón, De officiis fue definido como un esfuerzo de definir los ideales de la moral pública.

La obra, inspirada en un trabajo análogo del estoico del siglo II a. C. Panecio, está dividida en tres libros. Lo Honesto, lo Útil, y finalmente el conflicto entre estas categorías.

Afirma que la ausencia de derechos políticos corrompe las virtudes morales y propone la existencia de una ley natural eterna e inmutable que gobierna a absolutamente todos los seres humanos y a los dioses por igual, estableciendo los fundamentos del iusnaturalismo.

Cicerón replantea las concepciones filosóficas helenísticas para ofrecerlas como punto de referencia para una clase dirigente romana que sepa contrarrestar la caída de la república.

Las virtudes del estoicismo en Cicerón son definidas en las cuatro partes de la honestidad, que son la justicia, la sabiduría, la fortaleza y la templanza.

Esta postura viene dictada por la situación en la que Cicerón se encuentra escribiendo, que ve el progresivo abandono de la política por las clases medias que, en su opinión, son responsables de velar por la república.

La justicia es la virtud fundamental. Su interrupción puede ocurrir de forma activa, por la codicia de dinero o por el ansia de poder, pero también por omisión, es decir descuidando el propio deber hacia la sociedad.

El proyecto político de Cicerón se basa en la armonía entre los BONI, es decir la clase media, que debe ser capaz de sacrificar el propio interés inmediato, incluso su propia gloria en el nombre del país.

A ellos por lo tanto no les debe faltar la templanza, pero debe cumplir con lo que es conveniente, es decir con el decoro.

La ciudad de Dios, cuyo título original en latín es De civitate Dei contra paganos, es decir, La ciudad de Dios contra los paganos, es una obra escrita en 22 libros de Agustín de Hipona que fue realizada durante su vejez y a lo largo de quince años, entre 412 y 426.

Es una apología del cristianismo, en la que se confronta la Ciudad celestial a la Ciudad pagana.

Las numerosas digresiones permiten al autor tratar temas de muy diversa índole, como la naturaleza de Dios, el martirio o el judaísmo, el origen y la sustancialidad del bien y del mal, el pecado y la culpa, la muerte, el derecho y la ley, la contingencia y la necesidad, el tiempo y el espacio, la providencia, el destino y la historia, entre otros muchos temas. 

Aristóteles dijo; la política es hija de la ciudad, la moral de su decadencia.

Así que ahora mismo vale la pena detenerse a pensar, ¿En qué etapa de la vida como Ciudad, Pueblo o Nación estamos ubicados en; Huatabampo, Álamos, Etchojoa, Navojoa, Cajeme, Empalme, Guaymas, Hermosillo, Caborca, Santa Ana, Ímuris, Magdalena, Nogales, Puerto Peñasco, S.L.R.C., Cananea, Agua Prieta, Ures, Sonora y México.

 

¿Vivimos en una ciudad, en plena civilidad y por lo tanto en la etapa de la política ?,

¿O bien, estamos en la etapa de la decadencia de la vida social?, sea en los usos, las prácticas y nuestras costumbres.

¿Hay o no crisis o decadencia de principios y valores en Sonora y México?

O ¿solo nos basta seguir profundizando o actualizando la liberación de la vida social y el espíritu republicano ?.Es necesaria la justicia  DISTRIBUTIVA. No solo la COMUTATIVA.

Como se puede colegir no es un problema de partidos o personas y grupos. No obstante, es un hecho que nuestras ciudades y regiones lamentablemente sufren, por la ausencia de valores, éticos, morales, si , no es que decaen.

Es el caso que hoy en día en México no existe institución ya sea pública o privada, como es la Radio o la Tv, los diarios o revistas que no tenga su Código de Ética, o reglamentación de los deberes y obligaciones, u oficios de estas para con la sociedad y de los de sus miembros. Pero todo ello, lamentablemente es letra muerta.

En tal virtud mínimamente deberíamos leer El Manual de urbanidad y buenas maneras, fue conocido popularmente como Manual de Carreño, fue escrito por el venezolano Manuel Antonio Carreño en Venezuela, en 1853.1

Esta obra contiene lecciones y consejos sobre cómo deben comportarse las personas en lugares públicos y privados, tales como el hogar, la familia, la escuela y el trabajo.

Si a Usted se le hace muy tediosos leer de Filosofía o sobre Ética, le recomiendo que lea el Manual de Carreño, pues sigue las pautas de los oficios de Marco Tulio Cicerón.